camine
por aquí con recortes
de
periódicos viejos.
Y eso
fue para que yo
me
olvide de los telediarios y de la caja tonta
y encienda
la cajita mágica de un poema
que
nadie quiere
entender,
sin hamacas ni cotufas,
sin
baba de mamá recalcitrante
que me
traiga las viandas al sillón
del
acomodo.
Sé que
no vas a llorar,
que
encontrarás extraña la ausencia
de
lugares comunes y que huirás del dolor
que
aquí te traigo en la memoria.
As the cat
Climbed over
The top of
The jamcloset, William Carlos Williams
El gato de algodón
que corona una colcha de nubes
mira la ingravidez o la intuye
mientras se eriza
y levanta una pata
para arañar el aire y después
relamer el azúcar que dejaron
abejas invisibles en un cordón
del zapato del tiempo.
Y se quedó escaldado.
Cecilia Domínguez Luis, prologuista del libro nos dice entre
otras cosas:
Cada vez que leo un libro de poemas de Antonio Arroyo Silva
pienso que estoy ante una nueva celebración del hecho poético. Y es que su
poesía se ha movido siempre entre la transparencia y el misterio…
Intervino Manuel Díaz Martínez quien realizó la lectura
crítica al tiempo que hizo una magnífica reseña de la trayectoria literaria del
autor considerando el poemario de notable.
Este nuevo libro de Antonio Arroyo es un eslabón más de su fructífera tarea lírica. En "Mis íntimas enemistades" el autor nos habla de la soledad y de la amistad, de esa soledad necesaria en donde el poeta se refuerza ante el poema y ante la vida. Nos confiesa también que se divirtió creándolo, estableciendo las reglas del juego, de lo cotidianidad de lo humano en unos versos libres, enérgicos. Pero quizás hay una sorpresa en este nuevo libro de Arroyo y es la mirada a su alrededor, a los afectos. Todo eso que tanto atañe al ser humano.
Este nuevo libro de Antonio Arroyo es un eslabón más de su fructífera tarea lírica. En "Mis íntimas enemistades" el autor nos habla de la soledad y de la amistad, de esa soledad necesaria en donde el poeta se refuerza ante el poema y ante la vida. Nos confiesa también que se divirtió creándolo, estableciendo las reglas del juego, de lo cotidianidad de lo humano en unos versos libres, enérgicos. Pero quizás hay una sorpresa en este nuevo libro de Arroyo y es la mirada a su alrededor, a los afectos. Todo eso que tanto atañe al ser humano.
Para cerrar el acto, Antonio Arroyo, Manuel Díaz Martínez y
una servidora recitamos algunos de sus poemas ante el público asistente a este
encuentro poético.
Blog-rosariovalcarcel.blospot.com
Fotos, Octavio Carlos Macías Estupiñan
Fotos, Octavio Carlos Macías Estupiñan
Celebro ese acto,Rosario.
ResponderEliminarTodo lo que engrandece a la poesía y a los poetas me alegra.
Un abrazo.