Por Juan Francisco González-Díaz
Moby Dick en las Canteras Beach, Rosario Valcárcel, Anroart
Ediciones, S.L., Madrid-Gran Canaria, 2012. Novela-testimonio de 209 páginas
donde la poeta y novelista, grancanaria, nos brinda un documentado fresco de
los pormenores del rodaje en las aguas de la playa de El Confital, del filme
británico Moby Dick, con John Huston de director, Ray Bradbury como guionista y
Gregory Peck en el rol protagónico.
Desde el primer renglón, una narradora testigo en primera
persona del presente, nos prepara y anticipa para lo que va acontecer: “Los
recuerdos son como el mar: van y vienen.”. Y acto seguido rememora, desde un
“hoy”, donde se ha puesto a “ojear fotografías”, y del que le llega “…un
recuerdo conmovedor, unas Navidades especiales: las del año 1954-1955, cuando
la ballena blanca flotó en la playa de Las Canteras… Moby Dick se iba a rodar
en nuestras aguas…”. Preámbulo, siempre en presente, para todos los que
nos adentremos en el libro. Instante inatrapable, donde empezamos a apreciar el
sutil magisterio de la Valcárcel en su narratura, sobre todo para jugar, como
le venga en ganas, con el tempo.
Después, del punto y aparte del “…Moby Dick se iba a rodar
en nuestras aguas.”; desde ahí, a manera de flashbak, o analepsis, somos
atrapados en el cuerpo de un pasado que actualiza esta novela-testimonio. Con
maneras amenas y un tanto desenfadadas, desde un cierto tono de ingenua picardía
adolescente, que nos va dando a conocer el personaje principal. Aquel narrador
testigo del que habíamos hablado, Maria Teresa, ese indiscutible alter
ego de Rosario.
De manera paulatina, en el desarrollo de la novela, vamos a
saber de ella, de María Teresa, quien al momento de la filmación tiene quince
años. Una hermana de trece, Lucía del Carmen. Y un novio, “por aquel entonces”,
José Antonio. Al término de la primera página, refiriéndose al arribo a la isla
de las principales figuras del filme, ella nos dice: “Mi hermana, Lucía del
Carmen y yo teníamos la intención de ir a recibirles a la Terminal de Gando,
pero…”
Pero, para eso, tendrán que acceder a la gratificante y
placentera lectura de este imprescindible título de la región canaria y de la nación
española: Moby Dick en las Canteras Beach. Que, desde lo literario y sin
hacerle concesiones a otros géneros, nos cautiva con la gracia de lo inefable,
en lo epocal histórico de esos años. Al ponernos de relieve, y casi sin
que nos demos cuenta, aspectos imprescindibles e inmanentes de los más variados
de cursares y conformaciones, que han ido conformando la idiosincrasia del ser
canario.
Doña Rosario Valcárcel, a partir de las fuentes de la
literatura oral y los testimonios escritos, crea su más reciente libro, sobre
la filmación de mayor trascendencia en Canarias. Destacando la construcción en
uno de los astilleros de Gran Canaria de la maqueta de la enorme ballena
blanca, para la decisiva secuencia final de la película y la presencia en la isla
de dos mitos del cine del siglo XX, John Huston y Gregory Peck.
Moby Dick en las Canteras Beach recoge y recrea todas esas
leyendas. Y nos las lega, al dejarlas registradas, en forma de libro, en
novela-testimonio, que va a ir pasando, -pasará-, a ser evidencia tangible de
lo canario y un fiel exponente de lo mejor de su literatura.
Buena y amena reseña de un libro muy recomendable, especialmente para estos meses de verano
ResponderEliminarMe lo apunto.
ResponderEliminar¿Ya fue la presentación? Últimamente no me entero de nada que no sea en ámbito ¿cómo lo hacen ustedes para conocer lo que va a haber por medio? si se puede preguntar claro.
Besos a los dos
Ana I.