martes, 30 de mayo de 2017

PEDRO LEZCANO, POETA COMPROMETIDO

Oda a la muchacha de la paz

Yo vi mi luz primera en unos ojos
serenos de muchacha.
Y si nacer es ver la luz primera,
mujer, tú eres mi patria.
Aprendí desde entonces
que mi patria era hembra y era ancha
y que en su vientre, henchido de futuro,
estaba la esperanza.
Cuando digo mujer digo sus hijos
y digo el agua clara que los baña
y digo el horizonte al que se asoma
cuando espera mi vuelta en la ventana.
Cuando digo mujer digo mujeres
en todas las ventanas asomadas
sobre las anchas tierras
que junto al hombre labran.
Dulce muchacha América,
dulce señora África,
dulce mujer Europa,
dulce novia Canarias.
Mi patria es cualquier sitio
donde la paz se asoma a la ventana.
Y no donde los hombres y los buitres
viven de la carroña y la guadaña,
donde los carniceros de la guerra
venden a bajo precio las entrañas.
¡Hay que matar la muerte,
ganar a la violencia la batalla!
Por la muchacha universal que espera:  su corazón es un tambor que llama.
Compatriotas del amor, unámonos
en el himno de amor de su palabra,
bajo el mando estrellado de sus ojos,
tras la bandera limpia de su falda.



Consejo de paz
A Fernando Sagaseta

1
Muchachos que soñáis con las proezas
y las glorias marciales.
Bajaos del corcel, tirad la espada;
los héroes ya no existen o están en cualquier parte.
Llegará la hora cero de ser héroes
cualquier día cruzando cualquier calle.

2
Contables misteriosos
cerrarán un balance.
Decretarán la nada entre los hombres
misteriosos contables.
Cuando en los hondos sótanos,
valientes y cobardes
recen al Alto Mando
por un soplo de aire.
No los oirá ni Dios, que está más cerca;
no los oirá ya nadie.

3
Negación de los nombres.
Negación de las frases.
Si no sois primavera, espuma o viento,
Fuerzas de Tierra, Mar y Aire;
si el vendaval no sois ni la semilla,
ni la lluvia que nace de los mares,
usurpadores sois de las palabras
nobles y elementales.

4
Homicidas sin culpa se disfrazan
del color de la tierra y de los árboles,
con floridos ramajes en las frentes,
como en las bacanales...
Pero no son alegres las canciones
que inspira el mosto de la sangre.

5
Muchachos soñadores de epopeyas,
escuchadme:
El pecho es el lugar que se designa
para el balazo de los mártires.
El pecho, nave heroica
donde retumba el corazón amante,
donde el plomo penetra limpiamente
como en templo de sangre...
Pero sucia de barro y excremento,
cae la estatua de Marte.
Vuestras definiciones,
vuestras sabias verdades,
la inteligencia es pus sobre las frentes
de miles de cadáveres.
Y en la tierra abonada por la muerte
sólo he visto crecer la flor del hambre.

Muchachos soñadores,
bajaos de corcel, tirad el sable.
Cuando las botas pisen los olivos
y su símbolo aplasten,
coged su savia espesa, echadla al mar,
y veréis cómo aplaca tempestades.

Poema de la maleta

Ya tengo la maleta,
una maleta grande, de madera:
la que mi abuelo se llevó a La Habana,
mi padre a Venezuela.
La tengo preparada: cuatro fotos,
una escudilla blanca, una batea,
un libro de Galdós y una camisa
casi nueva.
La tengo ya cerrada y rodeándola
un hilo de pitera.
Ha servido de todo. Como banco
de viajar en cubierta,
y como mesa y, si me apuran mucho,
como ataúd me han de enterrar en ella.
Yo no sé dónde voy a echar raíces.
Ya las eché en la aldea.
Dejé el arado y el cuchillo grande,
las cuatro fanegadas de la vieja.
- La hostelería es buena, me dijeron.
Y cogí la bandeja.-
Si señor, no señor, lo que usted mande,
servida está la mesa.
Yo por vivir entre los míos hago
lo que sea.
Vi a las mujeres pálidas del norte
arrebatarse como hogueras
y llevarse las caras como platos
de mojo con morena,
tanto que aquí no dejan ni rubor
para tener vergüenza.
Vi vender nuestras costas en negocios
que no hay quién los entienda:
vendía un alemán, compraba un sueco,
¡y lo que se vendía era mi tierra!
Pero no importa, me quedé plantado.
Aquí nací, de aquí nadie me echa.
(Hasta que el otro día lo he sabido,
y he hecho de nuevo la maleta.)
He sabido que pronto van a venir de afuera
técnicos de alambrar los horizontes,
de encadenar la arena,
de hacer nidos de muerte en nuestras fincas,
de emponzoñar el aire y la marea,
de cambiar nuestros timples por tambores,
las isas por arengas,
las palabras de amor por ultimátums,
por tumbas las acequias.
Si se instalan los técnicos del odio
sobre nuestras laderas,
los niños africanos, desvelados
bajo la lona de sus tiendas,
mirarán con horror las siete islas,
no como siete estrellas,
sino como las siete plagas bíblicas,
las siete calaveras
desde donde su muerte, y nuestra muerte,
indefectiblemente se proyectan.
Yo por mi parte cojo la maleta.
La maleta que el viejo
se llevó a las Américas
en un barquillo de dos proas,
¡Qué valientes barquillas atuneras!
Tienen dos proas, una a cada lado,
para que nunca retrocedan.
Vayan a donde vayan siempre avanzan.
¿Quién dijo popa? ¡Avante a toda vela!
Y yo.voy a marcharme, reculando.
Voy a dejar que crezca
sobre esta tierra mía
toda la mala hierba.
Voy a volver la espalda al forastero
que vendrá con sus máquinas de guerra
para ensuciar de herrumbre las auroras,
de miedo las conciencias.
Pensándolo mejor, voy a sacar de la vieja maleta
el libro, la escudilla, la camisa,
la batea, voy a pintar y a barnizar de nuevo
su gastada madera,
voy a quitarle el hilo y a ponerle
la cerradura nueva.
Y con ella vacíame acercaré a la Isleta,
y al primer forastero de la muerte
que llegue a pisar tierra
se la regalo, para siempre suya,
y que la use y nunca la devuelva.
¡No quiero más maletas en la historia de la insular miseria!
Ellos, ellos, que cojan ellos la maleta.
Los invasores de la paz canaria
que cojan la maleta.
Los que venden la tierra que no es suya
que cojan la maleta.
Los que ponen la muerte en el futuro
que cojan la maleta¡
Que cojan la maleta,
que cojan para siempre la maleta!

Las Islas Canarias han sido tradicionalmente tierra de poetas, populares y “cultos”. Esa diferencia entre lo popular y lo culto no estaba tan clara para Pedro Lezcano Montalvo, poeta, ajedrecista y político español (1920-2002), quien quiso ser poeta del pueblo desde el más alto conocimiento de la literatura. Afirmaba Carlos Pinto Grote, a quien consideraba su hermano, que era uno de los mejores poetas españoles de su tiempo.

En sus años universitarios en la capital de España, frecuenta a los garcilasianos. Escribe cuentos, teatro. Traba amistad con los garcilasianos, con José García Nieto, con Cela, Vicente Alexaindre y otros intelectuales de la posguerra.  

Influenciado inicialmente por los poetas del 27, especialmente por  Miguel Hernández, admirador de los vates isleños Saulo Torón, Tomás Morales y Alonso Quesada  -a los que considera padres espirituales de una obra poética nacida en las Islas pero con vocación universal-, alterna desde sus primeros poemarios publicados la poesía popular con la de contenido social y humanístico, sin despreciar la lírica más existencialista y amorosa. El propio Dámaso Alonso sería uno de sus críticos literarios más entusiastas cada vez que un poemario suyo salía a la calle.

De su obra en prosa hay que destacar La ruleta del Sur (1956), Desconfianza (1945), Diario de una mosca (1994) y Cuentos sin geografía y otras narraciones (1968). De su obra poética quizás sean La Maleta (1982) y Consejo de Paz las más conocidas, pero también hay que mencionar libros como Cinco Poemas (1944), Romancero canario (1946), Paloma o herramienta (1989) y Romance del tiempo (1950).

Pedro estuvo comprometido con la sociedad, es decir, con la visión universal que reclama mundos en libertad y exige el imperativo de la justicia social. Es uno de los cinco poetas que compusieron Antología cercada (1947), obra crítica  que convierte al ser humano –y a los poetas- en su protagonista principal, denuncia contra los cercos que aprisionan en la España franquista y cuya reedición (2012) debemos al Cabildo grancanario (gobernaba el PP).

Pedro Lezcano obtuvo el Premio Canarias de Literatura. Siempre trató de que en su obra estuvieran incorporadas todas las voces, por eso su poesía se acabó convirtiendo en un canto universal a Canarias.


Nota: Por el poema, de nombre "consejo de paz", Pedro Lezcano y Salvador Sagaseta, el periodista que había aludido al mismo en la página literaria dirigida por él en el Diario de Las Palmas, fueron sometidos a un consejo de guerra. Pedro fue condenado a arresto domiciliario y Salvador Sagaseta fue castigado con la cárcel.

domingo, 28 de mayo de 2017

Un primer caballero entre primeras damas: la foto viral de la cumbre de la OTAN

 Gauthier Destenay, esposo del primer ministro de Luxemburgo, roba el protagonismo a Melania Trump y Brigitte Macron.

 La esposa del presidente de EEUU, Melania Trump, y la del francés, Brigitte Macron, estaban llamadas a acaparar ayer todo el protagonismo de la otra cumbre, el programa paralelo para consortes lejos de la reunión de la OTAN en Bélgica. Una agenda paralela entre museos, tiendas de lujo y el Palacio Real en Bruselas.



Sin embargo, cuando llegó la hora de la foto de familia, todos los ojos se desplazaron hacia el marido de Xavier Bettel, el primer ministro de Luxemburgo. Gauthier Destenay fue el único hombre de la imagen, icono de la ruptura que supone que un jefe de gobierno hable abiertamente de su homosexualidad, se comprometa con su pareja y comparta con ella las grandes citas mundiales. Todo un primer caballero entre primeras damas. Ni la norteamericana ni la francesa, ni la turca Emine Erdogan con su pelo cubierto ni la anfitriona, la reina Matilde de Bélgica.

EFEDe izquierda a derecha: la primera dama francesa, Brigitte Trogneux; la primera dama turca, Emine Gulbaran Erdogan; la primera dama estadounidense, Melania Trump; la reina Matilde de Bélgica; la mujer del secretario general de la OTAN, Ingrid Schulerud; la mujer del presidente búlgaro Desislava Radeva; la mujer del primer ministro belga, Amelie Derbaudrenghien; y en la segunda fila: el marido del primer ministro de Luxemburgo, Gauthier Destenay; la mujer del primer ministro esloveno, Mojca Stropnik; y la primera dama finlandesa, Thora Margret Baldvinsdottir.

Xavier Bettel se casó en mayo de 2015 con su pareja de hecho desde 2010, el arquitecto belga Gauthier Destenay, en lo que fue una de las primeras bodas homosexuales en el Gran Ducado, meses después de que el Parlamento aprobase la unión legal entre personas del mismo sexo. Destenay ha destacado siempre por su discreción, hasta el punto de que se conocen pocos detalles de su vida.

Nadie llamó tanto la atención como él, hasta el punto de que su imagen, sobria, sonriente, se ha convertido en un acontecimiento viral en las redes sociales. Pero él está ahí porque es el esposo del primer ministro de Luxemburgo y reivindica su sitio.

Algún día la estampa será tan natural que dejará de ser noticia, pero mientras.



  • Redacción ElHuffPostAgencias

viernes, 26 de mayo de 2017

UN POETA JOSÉ VALENTE.


 Ahora no tienes, corazón, el vuelo...

Ahora no tienes, corazón, el vuelo
que te llevaba a las más altas cumbres.

Lates, reptante, entre las hojas secas
del amarillo otoño.

¿Y hasta cuándo en la secreta larva de ti?

¿Volverás a nacer en la mañana,
a respirar la frialdad del aire
donde hay un pájaro?
                                              ¿Lo oyes?

Canta arriba, en las cimas,  como tú, como entonces.

Tú eres sólo latir cobijado en lo oscuro.

Al pájaro que fuiste dedicas este canto.

                                                                                 (El vuelo) 


El adiós

Entró y se inclinó hasta besarla
porque de ella recibía la fuerza.

(La mujer lo miraba sin respuesta.)

Había un espejo humedecido
que imitaba la vida vagamente.
Se apretó la corbata,
el corazón,
sorbió un café desvanecido y turbio,
explicó sus proyectos
para hoy,
sus sueños para ayer y sus deseos
para nunca jamás.

(Ella lo contemplaba silenciosa.)

Habló de nuevo. Recordó la lucha
de tantos días y el amor
pasado. La vida es algo inesperado,
dijo. (Más frágiles que nunca las palabras.
Al fin calló con el silencio de ella,
se acercó hasta sus labios
y lloró simplemente sobre aquellos
labios ya para siempre sin respuesta.

"A modo de esperanza" 1955

José Ángel Valente,  poeta, narrador y ensayista, nació en Orense el 25 de abril del año 1929 y falleció en Ginebra el 18 de julio de 2000.

 Su trayectoria profesional comienza cuando aún es un estudiante que despunta como poeta, formando parte del “Grupo Poético de los 50”, dentro del cual representa a la poesía como una vía del conocimiento. En la década de los 60 su poesía evoluciona siguiendo una corriente llamada "poesía del silencio", desligándose así del movimiento poético de mitad de siglo. En este periodo destacan obras como A modo de esperanza (1954), Premio Adonais en ese año, Poemas de Lázaro (1960), Premio de la Crítica, La memoria y los signos (1966) o Siete presentaciones (1967).

Su poesía presentó una peculiar evolución, partiendo de una coherencia con la Generación del 50, para finalmente girar en torno al misticismo desarraigado de cualquier creencia religiosa. Entre sus más de dos decenas de poemarios publicados, destacan los títulos "A modo de esperanza", "Tres lecciones de tinieblas" y "Fragmentos de un libro futuro". Contamos con una completa selección de sus poemas, donde sobresale "Poeta en tiempo de miseria". A través de su trabajo ensayístico, también abordó temáticas abstractas y le interesó especialmente la pintura. Algunos de sus libros más importantes son "Las palabras de la tribu" y "Hermenéutica y mística".

Valente tuvo una de las carreras más brillantes de la literatura española, y el Premio Adonais o el Nacional de Poesía (el cual obtuvo en dos ocasiones)

 A lo largo de su vida residió en lugares como Madrid, París, Oxford o Ginebra pero, finalmente, no pudo resistirse a Almería, a su “irrenunciable luz”. Aquí llegó para quedarse.

Foto José Valente, (tomada redes sociales)




jueves, 18 de mayo de 2017

CUBA, LA ISLA EN VERSO


Siempre soñé con ir a Cuba. Y después de varias tentativas frustradas, por fin llegó la oportunidad: mezclar literatura y ocio. Y tuve suerte porque nos invitaron al “Sexto Encuentro de la Isla en Verso” en la isla caribeña. Un Congreso de escritores en los que participaron españoles y una decena de países latinoamericanos. El objetivo era interrelacionar la poesía, la cultura, brindar una oportunidad de encuentro y reafirmación de la diversidad.




Kiuder Yero Torres junto con su esposa Yuricel y un grupo de universitarios voluntarios organizaron desde la Habana a Holguín, pasando por Cien fuegos, Las Tunas, Santa Clara, Sierra del Rosario, Pinar del Río y otros lugares... conferencias, presentaciones de libros, recitales poéticos, artistas escénicos, trovadores… la celebración para la música y las artes plásticas con la exposición de fotografías del poeta mexicano Francisco Navarro Ruiz.  

Días pletóricos e intercambio de escritores de una orilla a otra, en las que podría destacar a algunos de ellos, pero ya se sabe que en estos casos siempre se olvida a alguien, así que nombraré solo a un poeta cubano excelente, Roberto Manzano.

Nosotros llegamos unos días antes a Cuba. Yo quería sentir el júbilo, el tintineo, las bandas de música, envolverme en el latido del:

 -Vacilón que rico vacilón Cha cha cha que rico cha cha cha… de la Habana Vieja, declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Así que visitamos las calles y las plazas del casco histórico: El Floridita, la Catedral, la Plaza, el convento de San Francisco de Asís. Contemplamos El Coliseo, la iglesia ortodoxa Nuestra Señora de Kaza con sus cúpulas de oro y cobre, el Gran Teatro de La Habana…

Y recordé aquella época de los sesenta que Manuel Vázquez Montalbán llamó “edad de la inocencia” en la que, según los historiadores, un pequeño grupo de guerrilleros había conseguido lo imposible: acabar con un gobierno totalitario y plantar cara a Estados Unidos. Fue el momento en que escritores, artistas e intelectuales pasaron por La Habana para conocer a Fidel Castro y a Ernesto Guevara y a su revolución.

Muchos conflictos surgieron con los escritores pero mantuvo relaciones con algunos como Hemingway, ya que la imagen de Fidel y la de Cuba saldrían beneficiadas de cara al mundo y al incremento del turismo. Lo cierto, fue que polémicas aparte, lo que nadie puede poner en duda es que, Fidel marcó la historia de la literatura de la segunda mitad del siglo XX.

Vivimos el flujo y el reflujo de los transeúntes, de vendedores y artistas callejeros, de las tienditas de artesanos, con aspecto soñoliento, que me recordaron a aquellas otras de mi niñez en las que yo solía visitar en busca de un polo de hielo o de un trozo de chocolate.

Descubrimos en la Plaza de la Catedral a unas señoras que vestidas a la moda cubana, eran el centro de todas las miradas mientras leían la suerte en la baraja a clientas maduras que quizás al escucharlas pensaban: - ¡Si pudiéramos empezar de nuevo a vivir!

Observamos edificios coloniales derruidos, antiguas casas solariegas, elegantes, con aspecto de haber sufrido un terremoto, habitadas por familias numerosas en las que ondean desde las ventanas ropas y más ropas recién lavadas. Y nos sorprendió ver inmuebles, mansiones y palacetes en vías de reconstrucción, tejiendo un tiempo nuevo, tanto que pensé que en un futuro no tan lejano, la maravillosa Habana no tendrá nada que envidiar a las grandes ciudades europeas.

Y entre mojito y mojito disfruté del placer de la conversación en La Bodeguita del Medio, por donde han pasado visitantes célebres como Ernest Hemingway, Pablo Neruda… Y entendí el sueño de los cubanos de una situación estable con una organización próspera. Nadie parece tener dinero. ¡Qué difícil es ganarse la vida allí, sobrevivir! Sin embargo, se las arreglan, no sé cómo.

Porque a pesar de que la educación y los servicios de salud son gratuitos, el internet es muy lento, leer prensa libre no está siempre al alcance, los anaqueles de algunos supermercados están vacíos y el único partido político legal en Cuba es el Partido Comunista (PCC). Entonces comprendí el alivio, que podría ejercer en el futuro, para la economía y la apertura de la mente, el incremento anual de visitantes al país.


Entendí el por qué se aferran a la belleza del baile, a la melodía que se mueve como una ola al ritmo alegre de: Guantanamera, guajira guantanamera / Guantanamera, guajira guantanamera, o la candencia triste que glorifica la figura de Che Guevara: Aprendimos a quererte / Desde la histórica altura / Donde el sol de tu bravura / Le puso un cerco a la muerte…

Disfruté de una Habana culta que exporta ingenieros, médicos, maestros, y de la que se comenta que hace bien poco existía cartilla de racionamiento. Una Habana con bicicletas- taxis y coches-taxis pintados de color fucsia, turquesa, blanco, esmeralda… La mayoría modelos americanos de los años cincuenta a los que se les escucha repiquetear los motores con un ritmo frenético. Gozamos también del largo de la costa de la capital, de los ocho kilómetros del Malecón, de ese Malecón que Lezama decía:

Al pie de las murallas / el aire tartamudo / desliza sus sirenas, / plata mansa sin hoy/ mana sus lunares/ entre lunas cansadas… que se a cercan por allí:

-Qué tal amiga, me dijo uno de ellos casi con un ronroneo acariciante, mientras me guiñaba un ojo.

Y observamos unos pocos pescadores que por la mañana tienden a media altura el sedal y esperan y esperan, como si ese fuera su destino, mientras recorren con los ojos a las turistas.

Pero lo mejor en el Malecón es la noche, cuando la luz es opaca y la vida fermenta en gestos y costumbres, y las jóvenes engalanadas con pedrerías y unos tacones de 8 centímetros sacuden el cuerpo al ritmo de guitarras, y se acercan al mar, a ese invento que toma cuerpo y se agita libremente y rompe su oleaje cuando escucha las alegrías y los problemas de las familias, de la gente de la cultura, cuando escucha las cotidianidades.

Pero nosotros habíamos llegado a Cuba con una  pequeña ayuda del programa de Canarias Crea, para participar en el “Sexto Encuentro de la Isla en Verso” y en las actividades que con motivo de las Romerías de Mayo se organizan en Holguín. Encuentros entre generaciones de artistas, intelectuales y promotores culturales de decenas de países. Y que este año recordaban la figura de Fidel y El Ché. Con el lema “De no hay hoy sin ayer.

Y participamos en un cruce de lenguajes entre argentinos, mejicanos, noruegos, alemanes, costarricenses y otros más. De una noche especial en la Casa de Canarias en Holguín en donde se hizo referencia al emigrante isleño como ellos llaman a los canarios y, recordaron a los palmeros, hombres y algunas mujeres que llegaron a Cuba para probar suerte con el deseo de mejorar sus condiciones socio-económicas. Recordamos que la madre de José Martí era tinerfeña…

Y por la noche hubo encuentros y sonrisas, grupos de bailes folclóricos, cantos canarios, el abrazo y la ternura de la poesía y un recital poético en donde intervinieron Benita López Peñate, Luis León Barreto, Rosario Valcárcel y dos grandes del teatro: Pilar Rey y Antonio Abdo con un poema de Arturo Maccanti: titulado El tiempo y una ciudad

Tantos días pasando por aquí/ triste o alegre con la vida/ pasando por aquí o con la costumbre / de la  vida –es igual- pero pasando/ siempre por esta calle, y esta plaza/ con árboles; y el oro viejo/ del otoño, dorándome la pena

Y el humor de Don Fito que protagonizó un espectáculo divertido ironizando las carencias y los trajines de su país. Y también por qué no decirlo hubo imposiciones y órdenes en espacios acompañados de presentaciones de libros y de encuentros.

Y dos invitados de excepción el curador de arte Diego Casimiro, un profesional en los saberes de la exposición y manejo en las obras de arte que asistió al encuentro con un programa especial. Visitó Galerías, Salas Exposiciones y Centros Culturales todas ellas acompañado de las guías culturales de la Organización.
Realizó entrevistas con técnicos, entablaron opiniones y posibilidades de futuras colaboraciones con exposiciones entre Canarias y Cuba.

Y la soprano Alma Anduix, que interpretó en el Conservatorio de música de Holguín: Del Barroco al bel canto, con piezas de Vivaldi Haendel, Rossini y Verdi acompañada por dos pianistas del Conservatorio y la participación del joven barítono Nelson Martínez, que con solo 23 años ha sido concursante en el famoso certamen Operalia organizado por Plácido Domingo. Nos obsequió con la interpretación del aria Eri Tu de la ópera italiana “Un ballo in Maschera”.

Y antes de dejar la isla volvimos a las calles, a las cuestas zigzagueantes, y a las grandes y anchas avenidas, a las placitas adoquinadas y a la Plaza de la Revolución en la Habana y nos hicimos fotos en el monumento a José Martí y con Camilo Cienfuegos y el Che Guevara y de nuevo visitamos la Habana Vieja, la Fundación de Alejo Carpentier, los puestos de libros y los museos. Entonces bañados en el aire tibio de la isla tomamos más mojitos y de nuevo tatareamos:

Guantanamera, guajira guantanamera / Guantanamera, guajira guantanamera y la candencia triste que glorifica la figura de Che Guevara: Aprendimos a quererte / Desde la histórica altura / Donde el sol de tu bravura / Le puso un cerco a la muerte…

Blog-rosariovalcarcel.blogspot.com


miércoles, 17 de mayo de 2017

EL SUICIDA

(cuento)
Al pie de la Biblia abierta –donde estaba señalado en rojo el versículo que lo explicaría todo– alineó las cartas: a su mujer, al juez, a los amigos. Después bebió el veneno y se acostó.
Nada. A la hora se levantó y miró el frasco. Sí, era el veneno.
¡Estaba tan seguro! Recargó la dosis y bebió otro vaso. Se acostó de nuevo. Otra hora. No moría. Entonces disparó su revólver contra la sien. ¿Qué broma era ésa? Alguien -¿pero quién, cuándo?- alguien le había cambiado el veneno por agua, las balas por cartuchos de fogueo. Disparó contra la sien las otras cuatro balas. Inútil. Cerró la Biblia, recogió las cartas y salió del cuarto en momentos en que el dueño del hotel, mucamos y curiosos acudían alarmados por el estruendo de los cinco estampidos.
Al llegar a su casa se encontró con su mujer envenenada y con sus cinco hijos en el suelo, cada uno con un balazo en la sien.
Tomó el cuchillo de la cocina, se desnudó el vientre y se fue dando cuchilladas. La hoja se hundía en las carnes blandas y luego salía limpia como del agua. Las carnes recobraban su lisitud como el agua después que le pescan el pez.
Se derramó nafta en la ropa y los fósforos se apagaban chirriando.
Corrió hacia el balcón y antes de tirarse pudo ver en la calle el tendal de hombres y mujeres desangrándose por los vientres acuchillados, entre las llamas de la ciudad incendiada.
Enrique Anderson Imbert (Argentina, 1910-2000)
de breves narraciones 

domingo, 14 de mayo de 2017

Se quedan "enganchados" practicando sexo

           Y los llevan por las calles hasta el hospital
  • El personal médico que acudió al hotel donde se alojaba la pareja tuvo que ingeniárselas para poder trasladar a los novios ante la imposibilidad de separarlos.
                                                                                                   Ha pasado en Kenia. Increíble pero cierto. Una pareja, que se encontraba de Luna de Miel, quedó «enganchada» mientras practicaban sexo, pero eso no fue lo peor... La única forma de llevarlos hasta el hospital fue transportarlos en camilla por la calle ante el asombro de los transeúntes que no dudaron en acompañarlos en procesión e incluso grabar vídeos.



Las imágenes de este insólito paseo fueron colgadas en las redes sociales y, como era de esperar, se han convertido en viral.

El hombre, en un acto de caballerosidad, intentaba ocultar la cara de su pareja para protegerla de las miradas de la multitud que los acompañaban entre burlas y risas.

Los hechos ocurrieron en el hotel Explor-Inn, cuando la joven pareja estaba practicando sexo. De repente, la mujer empezó a sentir un fuerte dolor y pidió ayuda a gritos.

El personal médico que acudió al lugar tuvo que ingeniárselas para poder trasladar a los novios ante la imposibilidad de separarlos.


Noticia: La Razón.es