pueden provocar tristeza o alegría.
La mirada de los seres humanos está influenciada por los
colores, por sus simbolismos que usamos sin saber por qué. Estamos
influenciados por las luces que nos rodean y por las sombras, por los matices
que llegan a moldear nuestra vida, el modo de pensar, los gustos, los miedos, nuestro
humor. El arte.
La obra pictórica que hoy nos presenta Carmen Cruz está
basada en los colores y en su repercusión sobre los sentimientos, sobre los
estados de ánimo de la pintora. Está basada en el acontecimiento, en el instante
de la luz que nunca es igual. Por eso puedo decir que su creación es un juego
sin objetivos, realizada por el placer de pintar, y en ese placer indaga en los
sentidos, en el alegato de la circunstancia, en el color. En la reflexión en
torno a la existencia que siempre es efímera.
Y en esa actitud ante la existencia se aproxima a la vida,
a las playas, a la claridad, se impregna de los colores fríos, de los azules y a los negros y expresa con pinceladas moderadas una pintura urbana: una ciudad dormida y otra
imaginaria. Celebra también los colores cálidos y el no color con sus oleos de
dunas en tonos ocres y las playas de arena rubia y de arena negra. O realiza
arriesgadas interpretaciones con empastes a base de espátula en verdes,
amarillos. O nos ofrece la monótona panza de burro. La modulación del cielo. El
horizonte.
Y pinta sobre el mar, las ondulaciones del agua, su
movimiento soñoliento, las imágenes sinuosas, estimulantes, los reflejos
artísticos que simulan la espuma o quizás sombras coronadas de matices más
intensos. Esboza los contornos de una orilla y plasma el curso sinuoso o geométrico de sus
olas, el efecto del movimiento de un mar al llegar a la arena. Otras veces nos
ofrece un mar embravecido en dos planos: mar y cielo dividiendo la composición
que está organizada por pinceladas azules y pinceladas del color de la ternura erótica, del color del desnudo, del
rosa. Y crea torbellino, el remolino de las profundidades con el color que los psicólogos clasifican la
sexualidad pecaminosa, con el violeta.
Y realiza un remolino de luces temblorosas que nos
despierta la curiosidad, porque no parece que estemos ante una instantánea pictórica,
sino ante un recuerdo.
Carmen Cruz ha renunciado a sus inicios figurativos, a
aquellos que realizaba por allá por el 2.003 para enfrentarse al lienzo sin
tener nada pensado, solo la intuición. Porque a ella le gusta dejarse llevar
por el color, la comprensión de la luz, los juegos ilusionistícos y la emoción.
Pero sobre todo se deja llevar por los cromatismos que surgen desde su
inconsciente, de un inconsciente hecho de colores y sentimientos.
Fotos:
Carmen Cruz con su hija Laura y su primo el también artista plástico Luis Montull
Fotos:
Carmen Cruz con su hija Laura y su primo el también artista plástico Luis Montull
Blog-rosariovalcarcel.blogspot.com
Una nueva pintora que se incorpora al mundillo artístico local de la mano de la mejor presentadora posible: ¡doña Rosario Valcárcel!
ResponderEliminarSus pinturas son algo impresionistas.
ResponderEliminarDe tu comentario, Rosario, destacaría 2 párrafos:
1. La mirada de los seres humanos está influenciada por los colores, por sus simbolismos que usamos sin saber por qué. Estamos influenciados por las luces que nos rodean y por las sombras, por los matices que llegan a moldear nuestra vida, el modo de pensar, los gustos, los miedos, nuestro humor. El arte.
2. Y realiza un remolino de luces temblorosas que nos despierta la curiosidad, porque no parece que estemos ante una instantánea pictórica, sino ante un recuerdo.
A propósito de ese eterno enigma que es el mar, el día 25 hay una reseña al libro " Las olas " de la escritoria Virginia Woolf. Será por la tarde en Ambito Cultural del Corte Inglés, a cargo de la escritora y psicóloga
Susi Alvarado.
Me gusta las cosas que escribes en tu blog y que me llegan a gmail, pero no hace falta que me las mandes 2 veces mi cielo, con una tiene
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarBonita exposición y muy buena presentación, Rosario y Carmen Cruz.
ResponderEliminarInicia Rosario la presentación con una cita de Goethe sobre la influencia de los colores que actúan sobre el alma y continúa con otras consideraciones que con distintos matices,
ResponderEliminarhabla del simbolismo de los colores, que sin saber por qué, influyen de forma destacada en el comportamiento de los humanos.
Sigue con una descripción de la obra y las motivaciones de la autora, basada en los colores y la repercusión de los sentimientos, en cuya obra ocupa un lugar especial como fuente de inspiración, el mar.
En definitiva, una detallada información tanto de la obra como una semblanza de la autora de esta exposición y nuestra presentadora siempre le busca su punto erótico, para no perder la costumbre, caso contrario, dejaría de ser Rosario.
Gracias Luis por esas palabras que no son otra cosa que producto del cariño.
ResponderEliminarGracias también a ti Fran Smith por leerme con atención, por tus palabras también cariñosas. He subido los dos comentarios, repetidos, para que veas que esas cosas ocurren. A mi mucho más, y lo siento pero no domino este sistema, se me escapa y lo vuelvo a repetir creyendo que no lo he hecho bien.
Gracias Antonio, pasamos un rato entrañable en la exposición de Carmen Cruz.
Y a ti Juan por esa fidelidad... Por cierto me encantó tu hija.
Un beso grande, grande para todos
Y feliz finde.
Excelente, como de costumbre, querida Rosario. Me ha encantado repasar todos tus trabajos de estos últimos tiempos y aprovecho este espacio para dejarlo sentado con todo el respeto y cariño que me mereces, inolvidable escritora. Jamás dejo se buscarte en tu blog y siempre te descubro maravillosa.
ResponderEliminarUn abrazo enorme.