En las últimas décadas estamos viviendo una especie de tsunami en la escritura literaria. Una escritura que ha optado por un lenguaje expresivo de mujeres como son las poetas Dunia Sánchez Padrón y María José Godoy, preparadas, inteligentes y comprometidas, en las que el Zapping ha sido la musa, el aliado y la palabra, la herramienta para crear un nuevo libro.
Dos
escritoras que hoy nos presentan un libro en común titulado Entre horas y Zapping de sueños y
realidades. Dos poetas que analizan las transacciones afectivas en los
tiempos actuales, sus recorridos interiores a través de la existencia. Nos
presentan a través de sus mundos creativos, poemas y relatos donde la verdad
sin aditivos y el eco de noticias surgen con un gran protagonismo.
Denuncia
María José en Zapping de sueños, las nuevas formas de acercamiento ante el
diluvio informativo y el transitar por los medios digitales y ahonda en
principios generales con versos en los que pensamiento y poesía dialogan en un
discurso narrativo:
Y el tiempo
de soñar se termina
frente a la
realidad que estoy
viviendo sin que le importe a nadie.
Hoy vacío mi alma para gritar al viento
mi dolor, mi
angustia, mi desespero.
vivo rodeada
de gente que busca poder.
Vivo rodeada
de ineptos que calientan sillas.
Vivo con
sonrisas falsas, mañaneras, y miradas
de envidia
por no sé qué razón.
Vivo tirando
de brazos para poder salvar
a una
infancia quizás, sin futuro.
Vivo con
pulpos que se agarran a los cargos
para usar su
poder y salir temprano.
Vivo en una SUCIEDAD llena de hipócritas,
pero vivo…
Algunas
veces los poemas de María José parten de la vida cotidiana pero su voz se eleva
y vuela libre y plasma numerosas realidades de una forma escueta como lo hacen
los maestros japoneses.
Los niños no
repiten curso,
todos son
inteligentes
para los
políticos.
Pero el tema central de su obra es la sensualidad, la narración del gozo y el amor. Reflexiona y desea contar las experiencias en torno al placer como refugio y para ello emplea el recurso de la palabra de una forma coloquial y cercana.
Mis piernas bailan en la carretera
de los
arrepentimientos como
una película
de amor a lo Humphrey Bogart.
Vestida de
azul y con sombrero
mis pies
danzan por las colinas
de la pasión
ahuyentando los reproches
de los
deseos conquistados por tus palabras.
Quiero
amanecer en tu cama, acariciándote,
descubriendo
tu cuerpo con mis manos,
escuchando
los suspiros de tu corazón.
Quiero
galopar en un desierto de sensaciones
cálidas
salpicadas por el sudor de las montañas
que
acaricias intentando moldearlas con las prisas
de un joven
que quiere comerse el mundo.
Vaivén de
madrugadas que guardo
[ hoy en mi memoria.
Desde sus comienzos, Dunia Sánchez ha sido fiel a una prosa alimentada en la sencillez y el misterio, a una sencillez que se desliza por las grietas de los sueños y se abriga de fantasías y candidez. De una candidez que cada día gana intensidad.
Siempre he dicho que nuestra escritora elabora una prosa poética misteriosa, de realidades y ensueños, porque a ella le gusta interpretar la realidad desde la irracionalidad, rozando lo misterioso y lo mágico. Lo onírico. Porque ella, igual que en su pintura, dibujos, óleos y acuarelas basados también en el surrealismo, se ocupa de la existencia humana.
Y en este nuevo libro, Dunia recrea en veinte relatos, cosas cotidianas del día a día, de cómo ve pasar la vida, la belleza y las miserias. Así, de esta forma la poeta se convierte en un derviche que gira y gira alrededor de un monólogo que nos sobresalta, como en este fragmento titulado Sentada:
Estaba sentada…porque ella estaba sentada. Sin darse cuenta miraba dos realidades, dos océanos paralelos, dos transeúnte iguales, su mesa donde se tomaría el café también era doble. Espero varios minutos, varios tiempos enfocados a esas dos realidades iguales y distintas a la vez. En una se le antojaba darse un baño en el inmenso mar que estaba poseído por las malas mareas, en otra solo mirarlo como se estrangulaban las olas en su impacto contra las rocas. Y estando sentada pensó que mejor sería hacer las dos cosas, darse un baño mientras veía estrangular las olas. Y lo hizo, se sintió aliviada, mientras se sumergía en esas aguas que la llevaban mar adentro en sus profundidades veía el estrangulamiento de las rocas en su impacto contra las rocas. Una energía fuerte se apoderó de ella y comprendió…porque era comprender que la había visitado la muerte. Una muerte
Dunia nos vuelve a confirmar su lirismo en su narrativa que recrea con un estilo propio, con una mirada comprometida con el lenguaje, con una mirada de encuentros y despedidas. Con la vida, con la naturaleza, con el amor y la muerte.
Entre horas y Zapping de sueños y realidades es un libro con una bonita portada, editado por Ediciones Aguere y Ediciones Idea. Un libro doble al que le deseo larga vida. Un libro que yo definiría de búsquedas y de encuentros. Un libro que recomiendo para tenerlo cerca y, de tanto en tanto disfrutarlo.
Fotografías cedidas por María José Godoy B.
No hay comentarios:
Publicar un comentario