Ayer estuvimos en la exposición de Elena Robayna y nos encontramos con una muestra amplia integrada por esas escenas de paisajes o alegorías de la naturaleza con las que nuestra artista parece sentirse atraída, tales como puestas de sol, bodegones, flores y retratos.
Por una pintura que conmemora las ternuras del hábitat, la pintura tradicional a la que ella se entrega con deleite desde que comenzó a recorrer este camino pictórico de la mano del pintor Juan Alberto Díaz.
Una pintura que juega con la imágenes de los paisajes, con los silencios y con las perspectivas de senderos, unos repletos de frondosidad, del frescor y de la sombra y otros dejando filtrar la luz entre sus ramas.
Nuestra pintora está comenzando a jugar con nuevas ideas, se
está dejando llevar por una pintura más expresiva, más lírica. Esta vez se ha recreado en los empastes y la opacidad, ha jugado con colores vivos: rojos, amarillos o azules, con
colores luminosos que le permiten reflejar otros matices, otras ideas, otras variantes
técnicas dentro de su realismo.
Quizás porque Elena Robayna está tendiendo a una nueva
etapa, a la recreación artística a través de impresiones de carácter más
intimista.
Mis felicitaciones por esta nueva exposición.
facebook/rosariovalcarcel/escritora
Sugerente exposición en la que Elena Robayna perfecciona su estilo y ofrece cuadros de interés
ResponderEliminarGracias Luis por tus palabras y por contar con tan agradable compañía.
EliminarUn abrazo grande, feliz pareja.
Querida Rosario, me ha encantado lo que has escrito, como siempre, transmites tu entusiasmo y saber hacer.
ResponderEliminarTe lo agradezco muchísimo. Un abrazo grandeeee.